Tenía pendiente
recuperar a Almudena Grandes para comprobar si, como sospechaba a raíz de
algunas de sus columnas de El País, su estilo había mejorado. El
libro con el que la conocí, Malena es un nombre de tango, me
pareció un poco comercial (aunque me enganchó muchísimo). Además, he leído su primera novela, Las edades de Lulú. He tardado en ponerme Inés y la alegría
porque, a pesar de su inmejorable puntualidad (lo recibí como regalo
la noche de mi cumpleaños), está escrito en español, y los
pendientes en mi idioma se me acumulan muy fácilmente. Escrita a la
vuelta de un fin de semana en Madrid de ésos que recargan las pilas,
con cafés o con lo que sea, aquí está su reseña. Con ella hago un
hueco en el blog a los amigos que me lo regalaron, aunque algunos ya
lo tenían.
Almudena Grandes escribió
este libro en el año 2010, inaugurando con él una serie de seis
novelas (de momento sólo ha publicado tres) que recibe el nombre de
Episodios de una guerra interminable. Con ella, Grandes
homenajea por un lado a Galdós y a sus Episodios nacionales y, por
otro, a aquellos que después de la Guerra Civil lucharon contra
Franco y su dictadura. Como ella misma dice, no escribe sobre
batallas grandes sino pequeñas, pero que hicieron posible la llegada
de la democracia a nuestro país.
Inés es una de las
protagonistas de esta novela, y a través de ella conocemos la
historia de la invasión del Valle de Arán. En 1944, varios miles de
soldados republicanos entran en España por los Pirineos para
intentar „reconquistarla“, y terminar así con la dictadura de
Franco. El plan no sale bien, pero a los franquistas no les interesa
hablar de ello porque les pilló desprevenidos. Al Partido Comunista
tampoco, porque no estaba detrás del plan. Es por eso que este
capítulo de la Historia de España está casi perdido en el olvido.
Y por ello Grandes lo recupera, para hablarnos de unos hombres
que, tras haber derrotado a Hitler luchando al lado del Ejército
francés en la Segunda Guerra Mundial, deciden volver a luchar contra
Franco. Porque, esta vez sí, los aliados tendrán que intervenir.
Tusquets editores |
Aunque la invasión del
Valle de Arán fue real, los personajes que la protagonizan en el
libro no lo son. Es aquí donde el libro puede cojear un poco: todos
los guerrilleros son buenos, guapos, simpáticos, y a pesar de estar
jugándose la vida (o quizá por ello), son capaces de encontrar el
amor. La historia de Inés y Galán es muy bonita porque, „no
existe una vida como la clandestina, ni tan mala ni, sobre todo, tan
buena“. Grandes describe muy bien cómo los sentimientos se
intensifican en una situación de guerra en la que no se sabe si se
sobrevivirá al día siguiente, y cuando todas las noches pueden ser
la última. En pocos días Inés y Galán han vivido
más que muchas parejas a lo largo de toda su vida, y eso está muy
bien contado.
La verdad es que durante
la lectura me reconcilié más o menos con Almudena Grandes, hasta
que sobrepasé la mitad del libro. Y es que a partir de ese momento
la calidad de la historia decae. Al principio se habla de
héroes, de soldados que lo arriesgan todo por un sueño y de jóvenes
que luchan por unos ideales que creían perdidos, pero en la segunda
mitad del libro todo eso desaparece. Yo creo que Grandes, aparte de
la invasión del Valle de Arán, nos pretende explicar los motivos de
la decadencia del Partido Comunista en España, hacernos entender por
qué surgió una brecha entre la resistencia del interior y la del
extranjero, contarnos cómo evolucionaron los españoles que se
quedaron y los del exilio... Y tanto quiere escribir que termina
cansando.
Yo recomiendo el libro,
aunque con ciertas reservas. Merece la pena leer sobre un hecho tan
llamativo que ha sido olvidado por todos, porque hay acontecimientos
que nadie quiere recordar, y eso es lo que los convierte en
interesantes. Pero, a pesar de que me ha gustado el libro, Almudena
Grandes sigue pecando de comercial... Supongo que no lo puede
evitar... o no la dejan.
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