jueves, 6 de noviembre de 2014

¡Melisande! ¿Qué son los sueños?, de Hillel Halkin

¡Melisande! ¿qué son los sueños? es un libro de esos que te entran por los ojos, que te llaman desde la estantería. En mi caso fue un regalo, pero si no, habría intentado leerlo igual. Lo primero, por el título: distinto, sugerente. Lo segundo, por la crítica que colocó la editorial, Libros del Asteroide, en la solapa: "Una de las más novelas de amor más extraordinarias de los últimos años, que nos habla del poder de la literatura y la memoria". Me lo tomé con prevención: decir eso es mucho. Pero terminé comprobando que es absolutamente cierto: el libro es conmovedor y está lleno de sabiduría; toca muy, muy adentro y merece muchísimo la pena leerlo.

Melisande está escrito de manera autobiográfica, aunque no sea (¿o sí?) una biografía. Es la larga y minuciosa historia de un hombre desde su adolescencia hasta la madurez, y del papel que en ella ha tenido el amor de su vida. Desde el principio, se aprecia que su relato tiene un receptor, que no es el lector, sino Melisande, la amiga íntima que conoció en el instituto, de la que se enamoró desde el principio y con la que terminará teniendo una relación. Hay veces que se dirige directamente a ella, en segunda persona. Y a medida que avanza la historia, su presencia se va haciendo más constante: en la juventud, Melisande era una joven idealizada, lejana y próxima, rodeada de otros acontecimientos desconocidos y apasionantes. La relación se acerca, según avanzamos, y el texto se va haciendo más íntimo, con el autor desmenuzando cada detalle de su vida junto a ella.

Hillel Halkin. Libros del Asteroide
Las primeras páginas son un retrato del Nueva York de los sesenta, de los sueños de juventud, de los ideales y las amistades casi inquebrantables que se forman en los primeros años. Después, el texto se hace más intenso: entramos con el autor en el vínculo que poco a poco va formando con Melisande. Y su voz es cada vez más sincera a medida que el tiempo del relato se le va haciendo más próximo. La magia del libro está en esa sinceridad que el lector siente como absoluta, como extraída de un diario o de una carta pensada para que solo lea ella, combinada con un amor que va creciendo desde los primeros impulsos hasta la plenitud, desde los momentos brillantes hasta los sufrimientos compartidos.

He leído a muy pocos autores con un relato que suene tan auténtico como éste. Halkin destila verdad a base de relatar lo intrascendente, y de hacer lo intrascendente extraordinario. Hay un amor inmenso desde la primera a la última página pero eso sólo se entiende del todo al final. Entre tanto, para completar el libro, entremezcla dos historias geniales: el mito de Melisande y Geoffroy que explica el nombre de la protagonista, y la parábola del Evangelio de San Mateo sobre la mujer que se casa con siete hermanos. A partir del texto bíblico Halkin construye un cuento increíble, que interrumpe pero no rompe el hilo del libro.

"La verdad sólo está en el amor", le dice Geoffrey a Melisande en el poema que incluye Halkin en su libro y que es una descripción perfecta de cómo vive él su amor por ella. Es también lo que el escritor parece querer decirnos, de la primera a la última línea.

Ratita presumida
  
¡Estamos en Twitter! Síguenos aquí: @ratasbiblioteca 

4 comentarios:

  1. Si te digo la verdad a medida que avanzaba en la lectura de esta historia iba perdiendo fuerza y se convertía en "una más!". Al final terminé con un sabor agridulce
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola!! Ay, pues a mí me encantó, creo que se nota... Los libros dependen también del momento en que te pillen; a mí me llegó muchísimo. El tema no es nada novedoso, es cierto, pero la forma de contarlo me impactó. Un beso y gracias por leernos!

      Eliminar
  2. A mi también me ha encantado! Una historia rápida, que en ningún momento se hace pesada pero muy intensa, sincera y sin altibajos. El estilo acompaña, claro y sencillo pero que transmite con gran exactitud los sentimientos y sensaciones por los que pasa el protagonista de esta gran historia de amor. Yo ya he empezado a recomendarlo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegro mucho de que te haya gustado, Alejandra! A mí me gustó muchísimo y el final me pareció increíble. Es verdad que el estilo es clave: escribe de manera muy natural, muy sencilla, y te crees cada palabra que dice. Es una historia de amor como tantas, sí, pero contada de forma muy auténtica. ¡Muchas gracias por pasarte por aquí!

      Eliminar