No soy muy aficionada a leer biografías, pero después de haber leído la de Negrín, quería leer la de Azaña, político con el que no siempre se entendió bien. Vida y tiempo de Manuel Azaña es muy exhaustiva, y eso la hace a veces pesada de leer. Pero he aprendido mucho de Azaña, de su vida como político y también de su vida personal, así que cumplí el objetivo que tenía.