Es curioso leer Todo lo que era sólido un par de años después de que Antonio Muñoz Molina lo escribiera a toda velocidad mientras veía desmoronarse España a su alrededor. El escritor llenó páginas de agitadas reflexiones cuando su país ocupaba las portadas de toda la prensa extranjera y se hablaba día sí, día también, de salir del euro y de hecatombe económica. Se respira en sus reflexiones una mezcla de miedo y de asombro. Y se aprecia la urgencia por escribir un libro que analizara mínimamente los cambios que se estaban viviendo y, también, la propia necesidad del escritor de explicarse cómo se había llegado hasta aquí. Ahora que en apariencia las cosas parecen haberse calmado algo, leer Todo lo que era sólido sirve para confirmar que nadie ha movido un dedo desde esos días en que parecíamos al borde del naufragio. Y para comprobar que los problemas siguen siendo los de siempre, desde hace muchos años.
Un blog de ratas de biblioteca para ratas de biblioteca, con críticas literarias que nunca te desvelarán el final de los libros.
domingo, 28 de septiembre de 2014
domingo, 21 de septiembre de 2014
Ha vuelto, de Timur Vermes

martes, 16 de septiembre de 2014
El hombre en busca de sentido, de Viktor Frankl
Una teoría psicológica, un libro de autoayuda, otro testimonio sobre el horror del Holocausto... El hombre en busca de sentido, de Viktor Frankl, se puede leer de muchas formas. Yo lo tenía enterrado entre los muchos libros que obligan a leer en el instituto -éste, en clase de Filosofía- y por distintos motivos decidí rescatarlo este verano. Muchas páginas cayeron en vagones y estaciones de tren alemanas. Algunas de las más estremecedoras lo fueron más por el contraste brutal con la paz de las vacaciones; con el paisaje, precioso, al otro lado del cristal.
Frankl, psiquiatra, vivió los campos desde dentro, como víctima, y lo utilizó después para escribir un ensayo sobre el hombre y su capacidad para seguir viviendo mucho más allá de sus circunstancias. Es otro punto de vista, enriquecedor y distinto, del terror nazi. En este caso, Frankl nos habla de ello para enfrentarnos, desde su trágica experiencia, a nuestras propias vidas.
Frankl, psiquiatra, vivió los campos desde dentro, como víctima, y lo utilizó después para escribir un ensayo sobre el hombre y su capacidad para seguir viviendo mucho más allá de sus circunstancias. Es otro punto de vista, enriquecedor y distinto, del terror nazi. En este caso, Frankl nos habla de ello para enfrentarnos, desde su trágica experiencia, a nuestras propias vidas.
miércoles, 10 de septiembre de 2014
Inés y la alegría, de Almudena Grandes
viernes, 5 de septiembre de 2014
El blog del inquisidor, de Lorenzo Silva
Tomé prestado El blog del inquisidor esperando una nueva aventura de los agentes Bevilacqua y Chamorro, y encontré una historia muy diferente, aunque también con su punto de misterio. En el fondo, cuando más me gusta Lorenzo Silva es cuando se mete por caminos distintos. Este era muy complicado, pero logra resolverlo y sacar de un comienzo intrincadísimo una novela sobre los miedos y los fantasmas que todos llevamos dentro.
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