Tras una pausa de un par de libros,
retomé la saga de moda con Choque de Reyes. Pero ahora no sé muy
bien cómo escribir la entrada, porque el principio del tomo es el
final de Juego de Tronos, y no quiero desvelar finales. Así que aquí
dejo esta mini-entrada adelantando que, si no fan incondicional, sí
que me declaro enganchada a las aventuras de Poniente. Habrá
una tercera entrada sobre los libros de Martin.
Choque de Reyes, segundo tomo de los
siete que completan la serie, se publicó varios años después que
el primero, y el autor empieza la trama recordándonos detalles,
personajes y relaciones entre ellos que facilitan la lectura hasta
que volvemos a tener en mente el mapa de Poniente y las familias que
viven allí. La continuidad con el primer libro es total, y se
cierran algunas historias, pero pocas, y se abren otras muchas
nuevas. Aparecen además personajes que eran meros secundarios (o ni
eran) en el primer tomo y que ahora tienen papel protagonista en la
trama. Otros personajes, sin embargo, se quedan en segundo plano y
sabemos muy poco de ellos en los meses de otoño que Martin nos
describe en este segundo libro. En Choque de Reyes Martin nos cuenta
cómo se acerca el invierno, y con él la magia va ganando
protagonismo.
Al ser una mera continuación, yo diría
que en este libro pasan menos cosas que en el primero. Pero, por el
resto, si os gustó Juego de Tronos, Choque de Reyes os gustará
también. Yo volveré a hacer una pausa para tomar aliento (y leer
otras cosas) pero adelanto que el tercero, Tormenta de Espadas,
según todo el mundo es alucinante. Por qué, no lo sé, pero
tranquilos que cuando lo sepa, no lo contaré.
Ratita de laboratorio
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