En este libro García Mellado habla de varios temas: de los miedos que uno adquiere cuando crece, y de lo difícil que es a veces madurar y hacerse adulto. Habla del amor y del desamor, de lo que uno siente cuando quiere, y de lo que siente cuando le dejan de querer. Habla de la inocencia, de la perdida y de la que se recupera, para poder volver a amar con fuerza. Para ello emplea un estilo a menudo muy visual, donde los objetos y los conceptos siempre son de colores: el azul, el rojo y el blanco son utilizados a lo largo de toda la obra. También repite las mismas metáforas: los tigres, el fuego, las flores, los árboles son nombrados en muchos de los poemas. Los tigres blancos porque son únicos y raros, y por ello tienen gran valor, que son nuestro corazón, nuestra inocencia, nuestro yo más íntimo, que a veces perdemos o escondemos para no sufrir demasiado. Habla de las flores rojas que una mujer tiene en el pelo y en los labios, que son la ilusión que una mujer tiene cuando ama de verdad, y que le salen cuando es feliz. Con el verso libre como estilo, la autora escribe poemas cortos, por lo que el libro es ideal para leer poco a poco.
A mí lo de interpretar poesía, como que me impone, por eso no me arriesgo mucho en estaentrada. Yo no sabría decir qué significan todas las figuras que utiliza, o qué intención tiene la autora al escribir lo que escribe, de hecho lo que yo he entendido seguramente no coincida con lo que entiendan otros lectores, pero algunos de los poemas me han emocionado. Porque habla de corazones que se rompen, pero también de corazones rotos que se reconstruyen. Otros poemas, la verdad es que no los he cogido y no me han gustado tanto, pero bueno, como dicen por estas tierras, „man muss nicht alles verstehen“.
En fin, que yo, que siempre he dicho que los clásicos son clásicos por algo, y que tengo muy pocos autores preferidos que no duerman en el cementerio, me voy a animar a investigar más a estos nuevos autores. Quizá nunca se conviertan en clásicos, pero aman la literatura y luchan por mantenerla viva, porque hay que amarla para dedicarse a ella con la que está cayendo.
Ratita de laboratorio
Pues menos mal que no se te da bien lo de interpretar poesía...no como yo, que ni siquiera pude con Bécquer.
ResponderEliminarprueba con algo más moderno, como miguel hernández o josé hierro. ya nos contarás :)
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