Historia de un alemán, de Sebastian Haffner

Varios miembros de mi familia han leído Historia de un alemán, y algún amigo más está en ello. La otra ratita me cedió la responsabilidad de escribir la reseña porque el libro habla de Alemania y soy yo la que vivo aquí. Pero es difícil hablar sobre un libro que trata de la Alemania nazi, porque no se centra en los judíos que murieron en los campos de concentración, sino en los alemanes que, quizá no participaron activamente en todo ello, pero que sí asistieron a un drama a su alrededor sin hacer nada en contra. Es por eso que este libro incomoda, porque cuenta cosas que avergüenzan al pueblo alemán. Y es por eso que es difícil escribir una reseña, porque es una autocrítica de un alemán a sus iguales, y yo me siento un poco como una extraña al leerlo.

Sebastian Haffner es el pseudónimo que Raimund Pretzel, abogado y periodista alemán, empleó para publicar en Inglaterra en los años de la IIGM, durante la que estuvo exiliado. El manuscrito con los primeros capítulos de Historia de un alemán le permitió asegurarse un sueldo en el año 1939, con la promesa de ser su primera obra (autobiográfica) publicada en el país, pero el comienzo de la guerra le hizo cambiar de registro dejando el libro inacabado para centrarse en otra obra más política y acorde con los acontecimientos. Así, el esbozo de la obra permaneció durante años en el olvido, hasta que en el 2000 y de forma póstuma (Haffner murió un año antes), se publica tras su hallazgo entre los papeles del autor.

Este libro intenta dar respuesta a la pregunta que tantos se hicieron (y se hacen) sobre la llegada del Nazismo a Alemania: ¿cómo ha sido posible? ¿Qué les ha pasado a los alemanes para que estén de acuerdo con algo así? Y para dar respuesta, Haffner se sumerge en sus propios recuerdos infantiles hasta el año 1914, cuando comienza la Primera Guerra Mundial, de la cual recuerda, sobre todo, la emoción con la que esperaba cada día las noticias del parte de guerra. Una emoción que, según el autor, echaban en falta esos mismos niños convertidos en adultos, que anhelaban una época en la que cada día pasaba algo nuevo y distinto, y que querían dar a su país lo que se merecía pues, para su sorpresa, el último parte de guerra que escucharon anunció la derrota de Alemania.

En el caso de este libro no puedo desvelaros el final porque no lo tiene, ya que su propio autor lo dejó a medias. Aun así cuenta suficiente sobre unos años complicados, donde Hitler asciende al poder y empieza a poner en práctica su política de antisemitismo y falta de libertad. El libro da que pensar, porque menciona algunas de las tácticas de los nazis para imponerse entre la población, como la anulación del individuo en favor del grupo, como ya se contó en la película de „La ola“, o el abandono del país de los políticos que podrían haber liderado la oposición al Führer. La diferencia de este libro con otras obras sobre el nazismo es que lo cuenta desde el prisma de la autobiografía: Haffner nos cuenta su propia experiencia, utilizándola de punto de partida para realizar un estudio de la sociedad alemana. El autor sufre miedo, vergüenza, y no es perfecto, como no lo fueron muchos de los ciudadanos de la época que describe.

Haffner terminó abandonando Alemania, para ayudarle desde fuera, contando cómo era su país para que otros pudieran entenderlo. Y lo contó tan bien, que no son pocos los que pusieron en duda la fecha de autoría de esta obra, por su clarividencia. En la versión que yo he leído se adjunta una entrevista del autor en la que menciona el libro (como uno de sus primeros trabajos sin terminar) para reforzar la teoría de que la obra se escribió y se abandonó en 1939, lo que le da más valor a la historia que nos cuenta, ya que el autor no conocía lo que pasaría al terminar la guerra.

Historia de un alemán es un libro totalmente recomendable, para alemanes y no alemanes, aunque impresiona bastante. En este país muchos están hartos de estos libros (desde pequeños estudian el Nazismo y las causas de su nacimiento), pero para otros que no somos tan expertos no está de más leer una obra de este tipo, en la que es un alemán el que cuenta desde dentro cómo se gestó el auge del Nazismo, y así conocer mejor una época que no debe ser olvidada, para que nunca más pueda repetirse.

Ratita de laboratorio