Soy escritora aficionada de cuentos, pero leo pocos. Compré Pombero, publicado por Páginas de Espuma, para ponerle remedio a esta costumbre, a raíz de leer una buena crítica.
Los clásicos de verdad, como La Eneida, son asignaturas pendientes toda la vida hasta que se realiza su lectura. La Eneida llevaba mucho tiempo en mi lista, hasta que gané un lote de libros en un concurso y decidí incluirlo en el pedido. No sabía a qué me enfrentaba, si sería aburrido o demasiado largo. Y me ha parecido, de verdad, maravilloso.